PREPARADOS PARA SER MÁS FELICES 

Escribo estas líneas con sabor agridulce porque, a la alegría de haber tenido el privilegio de vivir en primera persona una experiencia inolvidable como la de Método SELF®, se une cierto grado de tristeza por haber finalizado mi paso como participante del programa. 

Tras las dos primeras jornadas, dedicadas al SER y a la ENERGÍA, llega el turno de la tercera, escrita con “L” de LIBERTAD, otro pilar fundamental del programa que remueve. Hemos aprendido a sentirnos libres independientemente de nuestras circunstancias, a identificar nuestros miedos y a saber cómo escucharlos para que dejen de limitarnos. También hemos trabajado la LIBERTAD desde el perdón, en especial a uno mismo. Hemos aprendido cómo seguir determinadas pautas para tener conversaciones sosegadas y productivas, liberándonos de situaciones que hasta ahora creíamos inalterables. Una LIBERTAD que parece brotar sola desde lo más íntimo de nuestro ser al compartir ciertos rasgos de nosotros mismos en este círculo tan valioso de personas.

El tiempo vuela y volvemos a encontramos dos semanas después en la cuarta y última sesión de este programa, que promete al venir presidida por la “F” de FELICIDAD; también de Fuerza, Foco, Fluir, Fiesta. Hemos identificado las claves de la FELICIDAD y un mapa para poder alcanzarla, sentirla y vivirla. Cada uno ha “cocinado” su propia receta para propiciar momentos felices en su día a día. Tomando consciencia de lo efímero de nuestra existencia, decidimos ponernos manos a la obra para dar forma a este plan mediante pasos y acciones concretas, eligiendo ser felices YA.  Porque, mi alma tiene prisa y el tiempo también.

Gracias a todos los que habéis compartido este primer programa de Método SELF® conmigo, por vuestra confianza, escucha, entrega y entusiasmo. Y gracias especialmente a Victoria y María del Mar por hacer realidad este proyecto y brindarnos toda su experiencia, dedicación y cariño. ¡Seguimos en la Generación SELF!

Cristina, edición mayo / junio 2018